En cada pasillo, en cada aula, en cada rincón de nuestra escuela, la energía de la Estudiantina 2025 estuvo más viva que nunca. Había llegado el momento que tanto esperábamos, ese en el que la música, la creatividad y la alegría se apoderaron de cada uno de nosotros.
Este no fue solo un evento; fue una celebración de lo que éramos. Fue el fruto de meses de esfuerzo, de horas de ensayos, de risas compartidas y de superación. Fue el momento de dejar volar la imaginación, de mostrar el talento que cada uno llevaba dentro y de pintar el mundo con los colores de nuestros sueños.
La Estudiantina fue mucho más que una simple competencia. Fue un símbolo de nuestra unión, de nuestra amistad y de la pasión que nos movió. Cada traje, cada paso de baile, cada nota musical y cada batucada contaron una historia. Fueron el reflejo de nuestro trabajo en equipo y de la dedicación que le pusimos a cada detalle.
Ese día, la EES N°46 “San Bernardo” se vistió de fiesta. Fue el día de brillar, de disfrutar y de sentirnos orgullosos de lo que logramos juntos. Subimos al escenario con el corazón lleno de emoción y la cabeza en alto. ¡Hicimos magia! ¡Lo dimos todo!
